Historias de los últimos preparativos para el triatlón más famoso del mundo

“Noosa representa todo lo que me gusta de Australia. Aquí me siento muy a gusto, como si estuviera en casa,” explica Luke McKenzie, que entrena en Noosa Heads, en la Costa del Sol de Queensland, Australia. No es ninguna casualidad que Noosa sea el lugar de entrenamiento de tantos triatletas de distancias cortas y largas mientras es invierno en Europa. Este pueblo de la Costa del Sol de Queensland, Australia, ofrece todo lo que busca un triatleta: instalaciones magníficas, una playa preciosa para nadar en aguas abiertas, equipos de natación, grupos de ciclismo y kilómetros de caminos de tierra con unos paisajes espectaculares y perfectos para correr. Si a esto le sumamos los restaurantes y cafés, el buen tiempo que hace y una población muy activa y amable, tenemos el sitio perfecto para entrenar y para dejarse ver. 

“Pienso que para entrenar fuerte te tiene que gustar el entorno que te rodea. Me gusta que no haya demasiado bullicio para poder salir a entrenar en plena naturaleza.”

“Los mejores sitios para salir con la bici en Noosa están tierra adentro. Esa zona la conocemos como “Hinterland”, y ofrece muy buenos puertos de montaña y pueblecitos con encanto.”

Noosa es famosa por las míticas salidas en bici en grupo los martes, jueves y sábados por la mañana. “Estas salidas en grupo las tengo incorporadas en mi plan de entrenamiento para practicar trayectos intensos y más cortos. Me encanta salir en grupo y entrenar 60-90 minutos con intensidad, y luego alargar la salida hasta las 3 o 4 horas en total. Casi siempre entreno en solitario o con uno o dos compañeros, pero también me gusta disfrutar de la dinámica del grupo para dar más variedad al entrenamiento. Hay todo tipo de deportistas, desde profesionales del ciclismo y del triatlón a aficionados de la zona.” 

Echemos un vistazo a la nueva SCOTT Plasma 5 de Luke, que incorpora el nuevo grupo sin cables eTAP de SRAM. El uso de bielas de 175 mm con una combinación de 55-42 permite alcanzar velocidades más que notables. En las carreras más importantes, Luke utiliza una cadena especial con tratamiento antifricción. Para poder tener un kit de reparaciones a mano y mejorar la aerodinámica de la bicicleta, lleva un prototipo de caja de herramientas en el tubo descendente, detrás del bidón aerodinámico. Este diseño es fruto de la colaboración con el ingeniero de aerodinámica Simon Smart, que también participó en el diseño del cuadro de la SCOTT Plasma 5. 

El ingeniero de aerodinámica Simon Smart no solo ha trabajado en el cuadro de la SCOTT Plasma 5 con su revolucionario concepto de integración de espacio de almacenamiento para barritas energéticas y kits de reparaciones, sino que además ha pasado horas y horas con Luke en el túnel de viento para optimizar su posición sobre la bici. “Simon Smart lleva tres años ayudándome a mejorar mi posición, y todo lo que descubre en el túnel de viento o mientras entreno o compito me lo transmite inmediatamente para mejorar mi postura. No solo se fija en la postura del cuerpo, sino que también presta atención a los materiales utilizados en el mono de competición, en las ruedas y en la posición del sistema de hidratación. Es una suerte contar con sus consejos y sus conocimientos para alcanzar estas pequeñas mejoras en mis prestaciones”, explica Luke.

“El otro lugar donde entreno es San Diego, California. Me gusta porque es una ciudad muy marítima, y me encanta el ambiente de las ciudades costeras.”

“Suelo salir a nadar en aguas abiertas los domingos por la tarde, ya sea para recuperarme a un ritmo fácil y agradable o para entrenar con intensidad. Lo habitual es ir a un ritmo suave hasta un punto determinado y luego subir a ritmo de competición para volver a la playa: en total, unos 2 o 3 km. También salgo a veces con los socorristas del club de surf, nos marcamos un recorrido de 300-400 m y hacemos series intensas tanto dentro como fuera del agua. Es un tipo de entrenamiento que puede ser muy duro.” 

Noosa tiene unos miradores espectaculares, como la Puerta del Infierno, en un promontorio rocoso en el extremo más oriental del Parque Nacional de Noosa.

“Hay quien nada desde la Puerta del Infierno hasta la playa principal de Noosa, pero a mí no me gusta nadar por esa zona, soy un gallina,”

comenta Luke con una sonrisa. En esta zona las corrientes son muy fuertes y además hay peces a los que es mejor no acercarse. 

“Aquí también puedo entrenar en el Noosa Aquatic Center. La piscina de 50 m está muy bien, y el equipo de natación es excelente. JR es muy famoso aquí, y entrena a los socorristas de la playa, a nadadores de élite y a los triatletas que se apuntan a su equipo.” 

A veces cuesta trabajo motivarse para estas sesiones de entrenamiento además de la natación, el ciclismo y la carrera, pero son esenciales. “He descubierto que a medida que cumplo años tengo que hacer más entrenamiento de fuerza, y suelo ir al gimnasio dos o tres veces a la semana. No suelo hacer pesas, pero sí hago mucho trabajo pliométrico, movimiento dinámico, estabilidad central y ejercicios de resistencia en sesiones de 45-60 minutos.”

“El lugar del mundo que más me gusta para salir a correr es el Parque Nacional de Noosa, por la Puerta del Infierno, con vistas al océano. El paisaje es increíble.”

“Tierra adentro, en Noosa tenemos bastantes caminos de tierra que también son magníficos para correr. Ahí es donde suelo salir a entrenar a fondo.”

Aunque tengamos lugares increíbles para entrenar y disfrutemos de un tiempo magnífico, también hay que entrenar en interiores. Luke entrenando a tope en la cinta en su cochera. La cinta me permite realizar diferentes tipos de estimulación para entrenar la carrera, y si se hacen bien las cosas, es un complemento perfecto para los entrenamientos al aire libre. “En la cinta me gusta hacer las sesiones de carrera más intensas para ganar ritmo con las piernas en un entorno más controlado. También hay veces que hago sesiones programadas para hacer en pista en la cinta, porque así reduzco los impactos y el desgaste. Empiezo a correr suave y luego voy subiendo de ritmo hasta un determinado umbral de intensidad. Hago series a buen ritmo de hasta 15-20 minutos, y también entreno a ritmo de carrera, en ocasiones hasta 90-120 minutos”, comenta Luke en relación a su entrenamiento en la cinta. 

“Cuando llego a casa en Noosa, lo que más me gusta es tomarme un buen café. Por supuesto, también me gustan otras cosas, es una comunidad pequeña y muy amable, tengo muchos buenos amigos aquí. Me siento como si estuviera en casa.”

“Probablemente estoy aquí también por otras cosas aparte de entrenar. Salgo a hacer surf, o me bajo a la playa con mi hija. Son cosas que me ayudan a descansar de las palizas que me doy en lo que se podría considerar que es mi trabajo.” 

“Cuando salgo a entrenar, sé lo que hace falta para ser competitivo en Kona. He participado ya 11 veces, y tengo la sensación de que ya conozco bastante bien esa carrera. Me han pasado muchas cosas en esta prueba. En Hawái he obtenido resultados buenos, y otros no tan buenos: el año pasado tuve que retirarme, y eso me empuja a volver para demostrarme a mí mismo que soy capaz de competir con los mejores, quiero volver a subir al podio.”

“En Kona me han pasado tipo de cosas, y sé qué hay que hacer para ser competitivo en esta competición.”

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