La estrategia de N1NO para Río era completamente diferente a la de carreras anteriores. A diferencia de lo que sucedió en Londres hace cuatro años, donde también se disputaron la carrera N1NO y Jaroslav Kulhavy, esta vez no intentó dominar la carrera desde el principio, sino que dejó que los demás hicieran todo el trabajo mientras él guardaba fuerzas. N1NO puso a prueba a sus rivales durante la prueba. “Di varios tirones para ver cómo iban, sobre todo por Jaroslav Kulhavy. Al final, vi claro dónde y cuándo tenía que dar el zarpazo. Me salió perfecto”, declaró N1NO.
Las últimas pedaladas fueron históricas. Nino se fijó un objetivo, trabajó para conseguirlo, y consiguió llevarse el gran premio.